La fresia es una planta que favorece los climas mediterráneos, los suelos húmedos y suaves, embellece especialmente jardines, terrazas y alféizares no solo por su forma elegante y sus coloridas flores sino también gracias a la fragancia delicada y muy agradable, colocada en los alféizares y ventanas. durante su floración para olerlo en casa.

Exposición:

Zonas extremadamente iluminadas: las ventanas y terrazas en una posición favorable al sol son ideales.

Temperaturas:

prefiere climas templados: entre 9 ° C y 25 ° C, si su fresia está plantada en una maceta, es recomendable si es posible protegerla durante el invierno para evitar cambios de temperatura por debajo de 9 ° C, de esta forma sus fresias pueden volver a brotar y volver a florecer la temporada siguiente.

Suelo:

El suelo preferido es una mezcla de suelo húmedo de turba y tierra, con una fina capa de arena en el fondo de la maceta para obtener el máximo resultado. Mantenga el suelo siempre bien húmedo, pero evite encharcamientos, en invierno es recomendable por ello reducir en gran medida los riegos.

Información y curiosidad:

Esta planta se considera muy misteriosa, se sabe que proviene de Sudáfrica, pero su origen real está envuelto en misterio. La esencia de la fresia es muy rara y buscada, de hecho es la base de muchas esencias y perfumes.

Según los registros históricos, esta planta también se utilizó como planta medicinal para los nacidos bajo el signo de Sagitario. Se dice que la planta sirvió para traer de regreso a los nacidos bajo este signo por el camino correcto, dada su particular característica de escapar de la vida real, de las obligaciones diarias y de los contactos humanos.

Otra curiosidad es el uso de la fresia para la composición de ramos de flores con motivo de bodas. El significado que le quieres dar con esta flor en una ocasión particular como el matrimonio es la inocencia y pureza de la novia.